Con su voz, su talento y su particular manera de ver el mundo, se ha transformado en un verdadero fenómeno musical. Lo de Íñigo Merino no es de este planeta y lleva ya cerca de un año demostrándolo. Llenando cada concierto que hace, colgando el cartel de sold out y rompiendo todos los barómetros y cifras en plataformas digitales. Sin embargo, ha sido ahora cuando el artista y compositor pacense ha dado su paso definitivo, publicando su nuevo trabajo discográfico, titulado «Tal vez mañana». Un álbum que es sinónimo de recorrido vital, un viaje a través de diferentes emociones como pueden ser la culpa, el perdón, el orgullo, la evasión, la rabia, la desesperación o la aceptación. A pesar de todo, el final es esperanzador y positivo. Esa es, en gran parte, la esencia del autor, lo que ha hecho que tanta gente haya caído rendida a sus pies. Nosotras incluidas, por supuesto.
Es increíble lo rápido que puede cambiarte la vida: de componer para uno mismo tratando de expulsar todos los demonoos que llevas dentro a cantar al mundo y conectar con las emociones más humanas y profundas. Íñigo tiene muy claro lo que quiere y todas sus canciones son una verdadera declaración de intenciones, latente en el ambiente. ¿Qué mejor prueba que este segundo disco que ya está presentando en vivo y en directo? Y es que tras haber dado el pistoletazo de salida el pasado sábado 15 de abril en la sala Changó de Madrid, el artista y compositor se prepara para las más de 12 ciudades confirmadas justo antes de las citas festivaleras del verano.
Aprovechando estos pequeños grandes hitos, hemos querido charlar largo y tendido con el propio Íñigo Merino. ¿Quieres saber todo lo que nos explicó? No te pierdas ni un solo detalle y síguele la pista muy, muy de cerca, porque viene para quedarse. Y a nosotras eso no nos puede hacer más felices.